Nariz de plastilina

[y las improbabilidades de la vida]

Nariz de plastilina y manos de lana, ¿qué le hacemos a la vida cuándo los dedos se nos quedan atrapados en la puerta del automovil? Tal vez podemos decir "merda", podemos agarrarnos la mano y saltar un rato sin gritar, porque si brincamos con cara de dolor y musitando alguna grosería en voz baja, definitivamente no estamos haciendo escándalo.

¿Qué otra cosa nos solucionaría la vida, nariz de lana y manos de plastilina? podemos sentir que pisoteamos a la torpeza si le damos de patadas a la misera puerta del automóvil - porque claro, la culpa no fue mía, fue del carro problemente - también podemos justificar esa poco afortunada característica riéndonos, aunque eso es lo que casi todos hacen...

¿Puedes plantear otra solución? sí...hacer un hermoso nudo con la lana, adornar nuestro cuello con él y colgarnos de alguna rama bella y amable. ¿Qué opinas? tienes 5 segundos para elegir